¿Qué es ser una mamá murciélago?

Me encanta dedicar tiempo a mi familia y mis hijas, aprender a ser madre con ellas, desde que nació la primera, he aprendido sobretodo a ser paciente (a veces), crear nuevas recetas para que les guste lo que comen, y lo que más me gusta, diseñar y crear su propia ropa, con todo, me considero una persona autodidacta que cuando se propone algo lo hace, aunque sean las 3 de la madrugada, de ahí mi nombre: "Una mamá murciélago" :)

jueves, 17 de septiembre de 2015

¡¡Volvemos a tener una cama para dos!!

Obviamente no soy pediatra, ni educadora, ni tengo título alguno respecto a la conducta infantil y cómo saber hacerlo lo mejor posible, tan sólo tengo mi experiencia como madre con mi hija, quiero decir que lo que hago en este blog, es contar mi historia, nuestra historia, y ninguna intención más que esa. (Para que no se malinterprete)

Empezaré diciendo que ha sido una semana completísima, ha habido de todo, llantos, tristeza, muchas risas y alegría y cosas positivas y negativas que hemos descubierto en nuestra pequeña familia. Pero para que se entienda el contexto me tengo que remontar a diciembre de 2014...

Nuestra hija, los primeros meses, durmió en el cuco del cochecito al lado de nuestra cama, ya que nació pequeñita y se sentía más arropada que en la cuna, después del cuco, la pasamos a la cuna y dormía mejor, si cabe, eso si, como donde vivimos hace bastante frío húmedo por la noche, la dejamos en nuestra misma habitación, por miedo que se destapara, que cogiera frío y todo eso... Estábamos muy orgullosos de ella, ya que siempre ha dormido del tirón sin darnos malas noches, salvo una o dos. Bien, llegado diciembre, y un resfriado con muchísimo moco, (cada ratito me levantaba y le aspiraba los moquitos porque si o si quería dormir con el chupete y le costaba respirar), una noche la metí en la cama con nosotros, después del resfriado vinieron las Navidades con diarreas, así que siguió en la cama con nosotros, y no se fue nunca más, hasta el domingo.
Tengo que añadir que tanto el padre como yo disfrutábamos de dormir los tres juntos, y el motivo por el cual hemos decidido dejar de hacer colecho, es porque había días en que mi pareja amanecía en el quicio de la cama y con la espalda rota, por lo que se mueve la renacuaja y por miedo a darle un golpe.

Domingo

El domingo, único día (completo) que estamos los tres juntos, por pereza decidimos no salir de casa, estuvimos encerrados todo el tiempo, y con una niña de 16 meses, se hace complicado, así que por la noche, los nervios ya estaban a flor de piel por el agobio y el aburrimiento de todo el día.

A las 20:30h fui a darle un baño a la peque, porque habíamos estado jugando con las perras y por el suelo de la terraza (y estaba histérica, así que probé si se calmaba con el baño), el baño la relajó, pero como está acostumbrada al baño una horita más tarde, me pedía el bibe para cenar a las 21:15h. (ella lo toma entre las 22 y las 23h normalmente) Al final se lo di, pensando, "si se duerme, que se duerma ya cenada". De este modo, nosotros pudimos ver una película juntos en el sofá con ella al lado dormidita. Antes de que acabase la peli y como ya había hecho una buena "siesta", se despertó con ganas de jugar, la intentamos dormir, remugaba, lloraba, y cuanto más lo hacía, más nervios había en el ambiente, total, que fue la gota que colmó el vaso y mi pareja ya dijo que nunca más volvía a dormir en la cama con nosotros, que estábamos malcriándola y perjudicando su conducta y favoreciendo sus rabietas cuando no consigue lo que quiere. Así que fuimos a la habitación a eso de las 2 de la mañana, y la pusimos en la cuna, (aún está afónica de esa noche), gritos y llantos, y más llantos y más gritos, me puse a su lado, sentada en el suelo y acariciándole la cabeza y cantándole, después de repetir la misma nana 3 veces, se durmió, me metí en la cama y a los 10 minutos se volvió a despertar, al final, el padre, se la llevó al salón, -"Si no quieres dormir, pues no duermas!!"- Y allí se quedaron los dos, hasta las 5 de la mañana, toda la casa despierta, de vuelta a la cuna, de vuelta a llorar, hasta que al final, después de muchas idas paternas hacia la cuna y volverla a tumbar una y otra vez, se rindió y se durmió. (Con todo esto, yo, y me imagino que el padre también, con el corazón roto de verla así).

Lunes

Sintiéndome fatal por habernos portado así y haberla dejado llorar durante la noche, ahora era yo la que lloraba por los rincones, durante casi toda la mañana, y no había nadie para consolarme, pero los besos que me venía a dar mi niña y ver su carita de "¿Que está pasando, mami?, no entiendo nada", hicieron que me tranquilizara y siguiera el día con normalidad.
A medida que se acercaba la noche, temía por lo que iba a suceder, pero la verdad es que me sorprendí muchísimo. Nos quedamos los tres dormidos en el sofá, y cerca de las 3 de la mañana fuimos para la cama y cuna. No se despertó hasta muy entrada la madrugada sobre las 4 ó 5, no miré la hora, la verdad. Se levantó y se puso a llamarme de nuevo, pero como si voy yo, es peor que si va su padre, él se levantó también y la colocó nuevamente para dormir, se durmió mientras él se quedaba sentado a los pies de nuestra cama, a modo que ella le viera allí al lado, no se volvió a despertar hasta cerca de las 10.

Nota: El lunes compré los Dodot Activity (para usarlos sólo durante la noche) y la infusión Blevit Sueños, esa noche le puse el nuevo pañal y la infusión en el bibe.

Martes

Un día cómo cualquier otro, por la tarde, teníamos natación y como le gusta ir a nadar, sería como un premio por haber dormido tan bien.

Esa noche, no se despertó hasta las 9:43 de la mañana.

Miércoles 

Desde las 12:30 hasta las 21:00 estuvimos fuera de casa, tampoco se ha despertado esta noche, y ha dormido hasta las 10:33h.

No canto victoria aún, y ojalá que esta rutina siga así, porque como dicen muchas personas que nos conocen, "tenemos una hija que no nos la merecemos."

De momento la dejamos con la cuna en nuestra habitación, ya tendrá tiempo de querer independizarse y querer ir a su cuarto... jajaja


Mamis y papis que me leéis, ya os he dicho, que ni aconsejo esto como método ni nada por el estilo, sólo he explicado como ha ido esta semana y los progresos que hemos hecho :)

Cuáles son vuestras experiencias?

miércoles, 9 de septiembre de 2015

Mamá "a contracorriente"

Siempre me ha gustado crear polémica, desde niña he ido al contrario que los demás (admito que muchas veces, sólo por fastidiar a los demás xD)
Generalmente, no me gustan las modas, y si me gusta alguna, espero a que pase su tiempo y entonces aprovecho para usar esa ropa que ya ha pasado de moda, por eso no me gusta ir de compras para mi, porque nunca encuentro nada que me guste, ya de niña, cuando iba con mis padres a comprarme ropa y le pedía a las dependientas o les describía lo que yo buscaba, siempre me contestaban lo mismo: "lo que tu buscas, aún no se ha inventado..."

"-Me describo con una fuerte personalidad, me gusta lo que me gusta por que me gusta, no por que me lo digan los demás o las modas.-"

Rockera, tatuada y con pendientes, casi siempre visto de negro y me gusta lucir tatuajes. Cuando me quedé embarazada, me hacía mucha ilusión eso de ir con un bebé en brazos o empujando el cochecito, y saber que la gente miraría hacia nosotros porque llevamos tatuajes y somos padres... Aunque en la juventud esta normalizado ya, las personas algo más mayores que nuestra generación, siguen sin entenderlo. Piensan que somos delincuentes, drogadictos o cosas peores, por llevar tinta en la piel?? Pues que piensen lo que quieran!!!

De hecho, la última fue en El Corte Inglés, mientras miraba ropa de rebajas para mi hija, vi como la madre de una mujer que iba con sus hijos (una señora de unos 70 más o menos), se me queda mirando de arriba a abajo, supongo que por mi aspecto (ropa negra, camiseta con una calavera y tatuajes en piernas y hombro a la vista), pude leer su expresión de disgusto, mirándome con rechazo y asomándose, no tan disimuladamente, para fijarse dentro del cochecito. Pero, ¿sabéis qué? Que no me importó, ojo! Entiendo de la época de represión que podría haber tenido esa mujer, pero así como yo no la juzgo por su aspecto de estirada y de las que parece que miran a todos por encima del hombro, como si por todo oliera a peo descompuesto, (en serio, no la juzgo, criticar no es juzgar... jajajaja), tampoco me gusta que me juzguen a mi, pues no creo que me haga ser mala madre el simple hecho de llevar pendientes y tatuajes, además, que a mi hija le encantan las tattoos de los papis y los pendientes de mami! :D


Después está la gente que opina cuando no se le pide opinión, con los pendientes de mi niña, (que decidimos no ponérselos porque preferimos que decida ella el día de mañana si se los quiere poner o no), claro, me ven a mi con los pendientes de la nariz y las orejas con varios aros en cada una y dicen, "y tu llevando tantos, no le has puesto a tu hija los pendientes??" - "Pues no señora, señorita o caballero, porque precisamente ella no es yo"